miércoles, 7 de enero de 2009

Un rostro y un nombre...(5ª parte)

Nada parecía estarse quieto. Notaba como si el suelo se deslizara por debajo de mí.

[¿Qué demonios ocurre?...]

Conseguí entre abrir los ojos. En efecto el suelo se movía. El engendro mecánico agarraba mi pierna derecha y me llevaba arrastrando por una de las cubiertas de la Novus Spes,ei. Sus rítmicas pisadas me acercaban paso a paso hacia la muerte. Una muerte, lenta y dolorosa.
Pensé en luchar, agarrarme, tratar de impedir el avance, pero tenía que ser realista. La mano biónica del cyborg no se soltaría, antes desgarraría el miembro. Aquel monstruo, aquella máquina, jamás se detendría ante nada. Ni dudaría ni se arrepentiría. Ni se asustaría ni recapacitaría. Por el momento, parecer inconsciente era mi mejor defensa. Usar mi cerebro, el único arma de que disponía.

[Si las directrices del robot eran que “toda forma de vida debía ser exterminada” ¿por qué no ha cumplido aún su cometido?...]

Pensaba. Cuando se detuvo frente a una compuerta. Parecía tener problemas con la apertura de la misma. Los androides tenían un sistema inalámbrico para accionar las compuertas ya que sus manos no les permitían manipular los controles manuales humanos.
Yo miraba con los ojos entreabiertos mi alrededor en busca de algún arma ofensiva que pudiera agenciarme. Nada.

#Humano#

Era escalofriante sentir una de esas voces dirigiéndose directamente a ti. Yo por supuesto me hice el desmayado.

#Humano#

Y mientras lo repetía giró todo su cuerpo de la cintura para arriba, dejando sólo las piernas en la posición original frente a la compuerta.

# Mis sensores me indican de tu conciencia. Deja de fingir o muere #

Me había descubierto. Abrí los ojos.

#Usa tu código de apertura#

-No tengo

Sin mediar palabra comenzó a apretar mi pierna que aún mantenía sujeta.

-¡Ahhhggg!

#Usa tu código de apertura#

-¡Está bien!, está bien… Abriré.

Tal y como tenía la pierna, correr no era una solución. En el mejor de los casos me alcanzaría antes de poder escabullirme. En el peor, me dispararía sin pestañear.
Miré el teclado de códigos. La escotilla se abría desde el lateral.
Me levanté lo más despacio que pude. Tratando de ganar tiempo para pensar en una solución.
De pronto recordé que en caso de que la energía de la ciudad disminuyera por la razón que fuese, las compuertas, siguiendo un programa de seguridad, veían su acción reducida a casi una cuarta parte. Dejando el paso justo para una persona, bajando con mucho el consumo de energía para poder distribuirla a labores más necesarias. Ahora bien, la Novus Spes,ei, por lo que me había informado antes de llegar aquí; tenía cuatro generadores nucleares principales. Cada uno de ellos alimentaba una parte distinta de la ciudad. Así, en caso de que alguno de ellos fallase, no se daba por perdida toda la estación espacial.

Dividida en los cuadrantes A, B, C y D (imaginemos un cuadrado dividido en estas cuatro partes) y estas a su vez divididas en seis pisos( y ahora un cubo) con lo que tendríamos cuadrante “A-1” “A-2” “A-3”… “B-1” “B-2”… así los cuatro cuadrantes hasta el sexto piso. Por supuesto la forma de la Novus Spes,ei no era precisamente la de un cubo, pero pensarlo así era un modo práctico para poder localizarte dentro de la inmensidad de la ciudad flotante.


2 comentarios:

SyNKRo dijo...

Me han entrado ganas de teclear el número y correr ...

Keydeth dijo...

jejeje..
"Tal y como tenía la pierna, correr no era una solución. En el mejor de los casos me alcanzaría antes de poder escabullirme. En el peor, me dispararía sin pestañear."

es lo que hay...el heroe tiene que estar cogido por los hue...os