Cambios y Casualidades... ¿o no?

A lo largo de nuestras vidas, a veces, se dan situaciones que nos hacen dudar si hay alguien controlando nuestras vidas. Algo o alguien que maneje nuestros hilos llevándonos por donde ellos quieren. Algunas personas prestan más atención a estas cuestiones y otras menos, llamándola de muchas formas a lo largo de la historia... Suerte, Casualidad, Dios, Destino, Sino, Fortuna, Azar, Hado, Chamba, Estrella, Predestinación, ... entre otras.
Sea cual sea el nombre que cada uno le demos, la realidad es que aveces pasan cosas muy raras y oportunas.

.De pronto piensas en una persona que hace años que no ves ni sabes de nada de ella. Aún así aparece de repente en tu mente sin más explicaciones y al girar la esquina allí te la encuentras.

¿?

.Te dan plantón una tarde y terminas conociendo esa misma tarde y gracias al plantón a alguien especial.

¿?

.Etc

Lo que me ocurrió a mí recientemente es para pensárselo dos veces.
Resulta que me encontraba incómodo en mi carrera (superior de Composición) hasta el punto de pensar en abandonarla por completo y dedicarme a otra cosa. A veces los profesores tienen la maravillosa cualidad pedagógica de conseguir éstas reacciones en un alumno.
Me quedaban tan sólo dos convocatorias para la unica asigantura troncal que había suspendido y ya a principios de curso se me había sugerido que me iba a volver a suspender por motrar ideales dispares a los suyos.
Ir cada día y verle la cara era un tortura. Hacer cambio de matrícula o baja de la misma sin razón convincente (esto es una baja médica, un contrato de trabajo, o algo así) supondría que mis dos convocatorias corrieran y tuviera que dejar la carrera, pero aún así la tortura psicológica era tanta que casi había decidido abandonarlo todo y a otra cosa, cuando mi querida madre me recordó una oportunidad profesional que se me había sugerido estas navidades. Una gira como músico. No solo me daba la oportunidad de trabajar con gente absolutamente profesional si no que solucionaría los problemas convocatoriales.
Me dispuse a buscar el teléfono para comprovar si seguía el puesto libre. Bajaba por la letra h de la memoria del movil cuando comenzó a sonar.
¿? para mi sorpresa era justo la persona que buscaba.

[No puede ser]
-¿Socio? -Pregunté aún bajo shock.
-Maestro ¿qué pasa?¿ cómo va todo?
-Aquí me ando
-Y sin saber lo c´ago
...Risas...
-Cuentame...
-Pues nada a ver si querías trabajar conmigo en la nueva gira...
-Es probable... convénceme un poco.

Y así, sin más, la solución de todo llamaba a mi puerta. Baja de matrícula sin correr las convocatorias, perder de vista a perrodaguas (visto lo visto tendré que contar alo sobre ella) espero que para siempre, contrato de trabajo en buenas condiciones, gente famosilla, hoteles, restaurantes, buen sueldo y auténticos profesionales y al fin y al cabo TOCAR EN DIRECTO que es lo que me gusta despues de todo. El curso que viene podré continuar con la carrera por donde la deje, en otro conservatorio y habré ganado un buen dinerito... todos tan contentos.

La pregunta es...¿Casualidad? ¿Destino? ¿Dios? Cada uno que piense lo que quiera. o haré lo mismo, el caso es que algo... algo... debe haber por ahí.